Esta serie de fotograbados e impresiones en gelatina de plata traza el arco de la creación de imágenes totalmente artesanales, desde la alquimia de la luz sobre la película hasta la profundidad táctil de la impresión sobre papel Fabriano. Los procesos revelan no sólo una imagen, sino el fantasma de su devenir. El grano se convierte en textura, las sombras en grabados, la plata en memoria. Dentro de este marco artesanal se despliega un teatro del misterio. Figuras atrapadas en poses que oscilan entre la ensoñación y la representación, objetos arrancados de los sueños, prendas que pueden ser a la vez traje y piel. Las composiciones evocan los encuentros fortuitos y la belleza inquietante que el Conde de Lautréamont comparó con “the meeting on a dissecting table of a sewing machine and an umbrella”. Inclinándose, pues, por las yuxtaposiciones absurdas pero elegantes del surrealismo.